Madres sin pareja por Elección.

Ser madre sin pareja era hasta hace unos años una circunstancia pero en la actualidad es también una decisión personal, una elección.

Madre sin pareja no significa estar sola tal como lo vemos en el Instituto Europeo de Fertilidad. Esta nueva forma de familia cuenta a menudo con un amplio apoyo entre sus familiares y amigos, algo fundamental para el desarrollo de la maternidad como proyecto personal.

En muchos casos las mujeres antes de tomar la decisión definitiva de tomar el camino de la maternidad en solitario pasan por un periodo de dudas pues concebir un bebe mediante la utilización de un donante conlleva implicaciones éticas y psicológicas que muchas veces bloquean a la mujer. Surgen dudas sobre la aceptación por parte la familia, el “¿Qué dirán?”.

Tomar la decisión de ser madre en solitario requiere de fortaleza emocional.

Una vez vencido el miedo a dar el primer paso todo empieza a tornarse menos oscuro y el camino queda despejado. No se trata de un capricho, se trata de una necesidad, un sueño, una ambición.

Si éste es tu caso, recuerda que disponemos de un equipo psicológico especializado que puede ayudarte a valorar tu decisión y orientarte para gestionarla emocionalmente.

Se calcula que uno de cada cinco tratamientos de reproducción se realiza para mujeres sin pareja. Además esta opción ha aumentado últimamente un 40 % debido a:

• La diversificación de modelos familiares y nuevos valores que hace que el ejercicio de la maternidad sea una decisión personal no necesariamente enmarcada en una relación de pareja.
• La incorporación de la mujer al mercado laboral en los últimos años y la imposibilidad de contar con cierta estabilidad hasta pasados los 35 años, con el consecuente descenso de la fertilidad que ellos supone y la necesidad de recurrir a la Reproducción Asistida.
• Las trabas para la adopción con las que se encuentran muchas familias monoparentales, tanto a nivel nacional como internacional.

¿Cuál es el perfil de las madres sin pareja por elección?

• Están solteras a consecuencia de una decisión personal.
• Son mujeres maduras, con edades entre los 30 y 45 años de edad.
• Han optado voluntariamente por la maternidad en solitario (por razones profesionales o por no haber encontrado a la pareja adecuada)
• Tienen un alto nivel académico y / o trabajos cualificados
• Presentan un nivel adquisitivo aceptable, aunque constituyen la única fuente de ingresos en el hogar
• Pueden conciliar jornada escolar y laboral
• Tienen una residencia próxima a la familia de origen o escuela o trabajo (suelen vivir en grandes ciudades)
• Son autónomas e independientes, con gran equilibrio emocional.
• Seguras de sí mismas, con iniciativa.
• Representan otra experiencia de la maternidad como proyecto de autorrealización

Consulta con el Instituto Europeo de Fertilidad si te estás planteando ser madre soltera o ante los primeros síntomas de infertilidad. Nuestra clínica y todo el equipo que lo formamos estamos comprometidos con la excelencia y el trato personalizado a cada una de nuestras pacientes. 

Cada paciente es única y así enfocamos nuestro trabajo hasta conseguir el embarazo con éxito.

Alfonso de La Fuente

Director Médico del Instituto Europeo de Fertilidad

Miembro de Sociedad Española de Fertilidad