No es sólo el estrés, la mala sincronización o desequilibrio hormonal lo que causa la infertilidad. La deficiencia nutricional, específicamente la falta de hierro, yodo, las vitaminas del complejo B, también puede conducir a problemas de fertilidad. A veces, incluso puede causar aborto involuntario.
Nutrición y Fertilidad
Una alimentación rica y variada es nuestra mejor aliada para tener una salud perfecta, no solo por motivos reproductivos, sino que es muy importante para mantener nuestra salud general.
La elección de los alimentos que vamos a consumir es fundamental, ya que deben proporcionar todas las vitaminas y minerales necesarios para lograr un embarazo sano y una vida saludable.
Mejoran las funciones metabólicas del cuerpo, tales como la presión arterial, azúcar en la sangre, la regulación de la hormona tiroidea.
El Instituto Médico Europeo de la Obesidad ha afirmado que el 15% de la población española no es fértil. Los motivos pueden ser varios, pero varios estudios también vinculan la infertilidad con el estilo de vida y la alimentación que llevamos.
Alimentos para la Fertilidad
Pescado azul y frutos secos:
Estos alimentos contienen ácidos grasos Omega 3 que ayudan a la maduración de los espermatozoides y favorecen la ovulación.
Verduras y frutas:
Ambos son de origen vegetal y ricos en antioxidantes. Esto facilita la desintoxicación del organismo de un modo natural.
Vegetales de hoja verde, cereales integrales y legumbres:
Tanto antes como después del embarazo el ácido fólico es fundamental. Los expertos en nutrición recomiendan incluir también en la dieta los huevos, ricos en colina.
Chocolate negro:
Tiene grandes propiedades afrodisíacas. Ahora bien, debemos controlar su consumo para no ganar peso. Otras opciones para mejorar el deseo sexual son la canela, el plátano y la vainilla.
Alimentos con hierro:
La infertilidad está unida a la ausencia de hierro. Para conseguir la cantidad necesaria de este mineral deberemos ingerir carne, espinacas, frutos secos y legumbres. Además, en los casos en los que el déficit es importante, los médicos suelen recetar un suplemento de hierro, cuya absorción se facilita con un vaso de zumo de naranja.
Vitaminas y Fertilidad
Llevar una dieta saludable es muy importante a la hora de concebir, de igual manera que el empleo de complejos vitamínicos.
A continuación te contamos qué vitaminas son más importantes para mantener la fertilidad, tanto en el hombre como en la mujer:
Vitamina A:
Favorece la fertilidad ya que participa en la formación de esteroides, base de las hormonas sexuales. La vitamina A es un potente antioxidante por lo que protege a las células del aparato reproductor masculino del proceso de envejecimiento prematuro producido por los radicales libres. Podemos encontrarla en la mantequilla, la leche entera, huevos e hígado. También está presente en forma de beta-caroteno (precursor de la vitamina A en el organismo) en la zanahoria, la calabaza, el albaricoque y en la mayoría de las hortalizas de color anaranjado-rojizo, así como en las verduras de hoja verde.
Vitamina B:
Las vitaminas del grupo B son esenciales para una buena salud reproductiva femenina y masculina.
En la mujer, la vitamina B6 ayuda a regular el equilibrio de estrógenos y progesterona en la fase lútea, tercera fase del ciclo menstrual que empieza justo después de la ovulación. Puede encontrarse en alimentos como: hígado, conejo, pavo, patatas, pimientos rojos y verdes, anacardos, cacahuetes y avellanas.
La vitamina B12 es esencial para el hombre pues aumenta el recuento de espermatozoides y por lo tanto aumenta también las posibilidades de concebir. Se encuentra en las vísceras como los riñones, el hígado y carnes en general, huevos, productos lácteos y pescados como las sardinas, el atún, y las almejas. El ácido fólico también es una vitamina del grupo B. Es necesaria para prevenir malformaciones y defectos del tubo neural en el bebé. Se encuentra principalmente en vegetales de hoja verde (espinaca, acelga y col), legumbres y cereales integrales.
Vitamina C:
La vitamina C ayuda a mejorar la movilidad de los espermatozoides evitando su aglutinación. Además, gracias a su poder antioxidante contribuye a luchar contra los radicales libres que afectan la fertilidad. Se puede encontrar en muchos cítricos como la naranja, mandarina, limón, pomelo, y también el kiwi (la fruta con mayor concentración de vitamina C), las fresas y en algunas verduras como tomates, brócoli y pimientos rojos, amarillos y naranjas.
Vitamina D:
La vitamina D tiene importantes beneficios en las funciones sexuales de hombres y mujeres. Algunos estudios llevados a cabo en pacientes masculinos estériles mostraron una falta aguda de esta vitamina. Por su parte, en la mujer ayuda a mejorar las condiciones del endometrio de cara a la implantación. Según investigaciones recientes, las tasas de embarazo aumentan cuando la mujer no presenta carencia de vitamina D. La luz solar es la principal fuente de vitamina D, la cual se sintetiza en nuestro cuerpo cuando nos exponemos a los rayos de sol, sin embargo en países como España resulta curioso observar la cantidad de personas que presentan un déficit de vitamina D. También se encuentra en pocos alimentos, entre ellos la mantequilla, los huevos, la leche y los pescados azules.
Vitamina E:
Es esencial para la regulación del sistema hormonal y mejorar la función del sistema reproductor. Un déficit de esta vitamina en la mujer puede alterar los ciclos menstruales, mientras que en el hombre puede disminuir la calidad de los espermatozoides. Se encuentra en el aceite de girasol, almendras, avellanas, nueces, yema de huevo, coco, cacahuete, soja y arroz.
Otras recomendaciones
Además de las vitaminas que hemos nombrado, hay ciertos minerales que favorecen la función reproductiva del organismo.
El zinc juega un papel importante, ya que se ha demostrado que bajos niveles de este mineral pueden reducir el volumen de semen y el nivel de testosterona en el hombre. Lo encontramos en las carnes, cereales integrales, mariscos, guisantes, avena.
Por su parte, el selenio previene las anomalías cromosómicas y aumenta el numero de espermatozoides. Se encuentra en la carne roja, pollo, pescado, granos enteros y atún.
También el yodo, presente en productos de mar, así como el hierro, presente en carnes y espinacas, y el calcio, que favorece la movilidad de los espermatozoides son minerales beneficiosos para mejorar la fertilidad.
Entorno alcalino para facilitar la fecundación
Además de tomar vitaminas para mejorar la fertilidad, debemos preparar nuestro aparato reproductor para la fecundación haciendo que sea “acogedor” para la correcta fecundación y posterior implantación del embrión.
El moco cervical es ácido y las células de esperma, por lo general, no pueden tolerar ambientes ácidos. Al consumir alimentos que son de naturaleza alcalina, estás preparando tus órganos reproductivos para que se vuelvan más amigables con los espermatozoides, lo que aumenta la actividad de las células de esperma y sus posibilidades de concebir. También debes evitar el consumo de alimentos que son altamente ácidos, tales como alimentos con alto contenido de azúcar procesada.
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Nuestra clínica y todo el equipo que la formamos, estamos comprometidos con la excelencia y el trato personalizado a cada una de nuestras pacientes.
Cada paciente es única y así enfocamos nuestro trabajo hasta conseguir el embarazo con éxito.
Director Médico del Instituto Europeo de Fertilidad
Miembro de Sociedad Española de Fertilidad